Nació: En Pamplona, el 9 de febrero de 1974.

Familia: Está casada con un donostiarra, Aitor, y es madre de Emma, de cuatro años.

Estudios: Cursó estudios de Comunicación Audiovisual
en la Universidad de Navarra.

Trayectoria: Su primer trabajo, en 1994, fue en la Cadena SER en Pamplona. Después estuvo en Pamplona Televisión, donde presentó un programa de variedades. En 1995 consiguió una beca en Radio España, en Madrid, y en 1996 se incorporó a Tele 5 como reportera.
Desde 1999 y hasta mayo de 2004 presentó los informativos de fin de semana de TVE y, a partir de esa fecha, sustituyó a Letizia Ortiz en el Telediario 2. En la actualidad presenta el informativo de mediodía de La Sexta.

Aficiones: Le gusta mucho leer y la música clásica, pero cuando viaja con su hija escucha en el coche a Shakira.

Aunque llevaba muchos años en televisión, primero como reportera en Tele 5 y después como presentadora en TVE, lo cierto es que Helena Resano hizo su debut para el gran público el día que se puso al frente del informativo de las nueve, en sustitución de Letizia Ortiz, quien había abandonado su trabajo por su compromiso con el Príncipe de Asturias.

Un acontecimiento que la obligó a marcar su territorio. Pero, ¿cómo evitar odiosas comparaciones? Se fue a la peluquería, se tiñó el pelo y se lo cortó de forma desenfada.

Pronto los espectadores quedaron prendados de la chica de ojos verdes y pelos como escarpias.

Y así podría haber seguido si no fuera porque le puede la pasión por la aventura, y la incursión de La Sexta en el panorama audiovisual lo era.

-Helena con “h” no es habitual en nuestro país. ¿Quién se lo puso?
-Es una promesa que hice a los trece años, en un intercambio con una chica francesa. Su familia me regaló una “H” de porcelana y empecé a escribir así mi nombre.

-¿Se han cumplido sus sueños de adolescente?
-A esa edad no tenía sueños especiales. En aquella época estudiaba piano, quería ser pianista. Pretendía que me dieran una beca para ir a Italia. Creía que ser pianista era fácil y que podía sobrevivir con la beca.

-¿Qué la obligó a cambiar de rumbo?
-Cuando estaba en séptimo de piano, me operaron de la muñeca, y tuve que dejarlo y ponerme a estudiar una carrera.

Torea en La Sexta con el informativo de mediodía. ¿Cómo se siente en una plaza casi desconocida?

-Con muchos nervios, aunque sigo haciendo lo mismo, pero es otro entorno, otra responsabilidad. En TVE me sentía muy arropada, porque estaba en un tren que sabía por qué carril tenía que circular. Y La Sexta es un tren que no sabemos por dónde va a ir; esa responsabilidad pesa. Pero si el periodista se acomoda pierde chispa, ingenio.

-En una conferencia en la Universidad de Navarra dijo que en esta profesión hay que ser humilde.
-Muy humilde. Yo estoy ahora en una redacción en la que soy vieja comparada con la mayoría. Y son esos jóvenes los que me están enseñando. Si llega un momento en que crea que lo sé todo y que no tengo nada que aprender, empezaré a equivocarme.

-¿Sustituir a la Princesa de Asturias se lo puso más difícil o le trajo suerte?

-Ni me trajo suerte ni me la dejó de traer. Lo que ocurrió es que el “efecto Letizia” nos puso a las presentadoras en el foco de los medios. Interesaba más nuestra vida privada, pero ya se pasó.

-Sin embargo, algo haría para diferenciarse del “modelo Letizia”.

-El día que me tocó dar el anuncio del compromiso yo llevaba una melena larguísima, casi como la suya. Me propuse romper con todo eso, y me corté el pelo por dos razones: porque estaba harta de llevarlo así y para evitar comparaciones. No quería que pensaran que iba a aprovecharme de su estela.


-¿En algún momento llamó para decirle cómo lo estaba haciendo?

-No, cruzamos un par de mensajes el día que la sustituí. Le dije: “¡Menudo marrón me has dejado!”, y me contestó dándome ánimos, estuvo muy cariñosa.

-¿Qué piensa, usted que la conoce, cuando escucha cosas como: “Yo en su lugar no me habría casado con el Príncipe”?

-Ella era muy consciente de lo que hacía. La suya ha sido una elección por amor. Y por amor lo dejó todo.

-¿Es bueno o malo trabajar en la misma empresa que su marido (Aitor es realizador de los informativos de La Sexta)?

-Siempre me he compenetrado muy bien con Aitor. Tener una persona al lado que no te ponga trabas cuando tienes que entrar a las dos de la madrugada o la dejas colgada en una boda es un privilegio. He llegado hasta aquí porque en casa he tenido a un hombre que no me ha puesto piedras en el zapato.

-Tiene una hija, Emma, ¿cómo compagina vida laboral y familiar?
-Esta noche me tocará contarle un cuento hasta que se duerma. Por cansada que esté, compenso el tiempo que estoy trabajando.

-¿Qué noticia le ha llegado más al corazón?
-La muerte de José Couso, era compañero de mi marido y yo había trabajado con él. Lo conocía bien y estaba viendo imágenes de cómo moría, fue lo más difícil que he hecho en televisión.

-¿Cuál le gustaría dar?
-Me habría gustado dar la de la tregua de ETA, pero no habíamos empezado a emitir.

-¿Optimista con el proceso de paz?
-Creo que esta vez puede ser, pero de verdad se sentirá la paz cuando gente que todos tenemos en la memoria pueda pasear tranquilamente, sin escolta.

|Diez minutos